Dibujando en el Campo

La historia en Dibujando en el Campo muestra cómo una maestra extraordinaria transforma la experiencia educativa de sus alumnos en una escuela única y especial.

En un remoto lugar entre montañas y un arroyo, se sitúa una escuela que parece carecer de lo esencial: no hay patio de juegos, gimnasio, biblioteca ni computadoras. La narradora, una niña que asiste a esta escuela, nos comparte su perspectiva: Nuestra escuela no tiene casi nada. Un pizarrón, unas sillas. Sin embargo, lo que realmente distingue a este lugar es la presencia de una maestra excepcional que transforma la experiencia educativa de sus alumnos. Ella siempre está ahí, esperándolos en la puerta cada mañana, lista para guiarlos en nuevas aventuras de aprendizaje.

El día que se relata en Dibujando en el Campo, la maestra decide llevar a sus estudiantes al exterior, donde les pide que dibujen algo grande y puntiagudo que se oculta entre los árboles. A medida que los niños comienzan a observar más de cerca, empiezan a descubrir la belleza de lo que tienen ante ellos. Pero la maestra no se detiene ahí; rápidamente señala la siguiente maravilla que deben explorar, manteniendo el ritmo de su curiosidad y asombro.

Este libro, lleno de inspiración y creatividad, invita a los niños a soñar con una educación que trasciende lo convencional. Dibujando en el Campo no solo es un homenaje a la enseñanza, sino también una llamada a la aventura, sugiriendo que experiencias similares pueden florecer en cualquier lugar del mundo, siempre que haya un maestro dispuesto a guiarlos.